Cuando hablamos de espectáculos infantiles , existe siempre la posibilidad de la creación de espectáculos originales o la adaptación de propuestas más o menos clásicas que se entienden adecuadas a ese público, por otro lado tan exigente.
Cuando entramos en el campo de las adaptaciones , no es difícil encontrar proyectos que simplemente se limitan a podar , haciéndolos a veces incomprensibles o a rodearlos de códigos simples de color y movimiento sin aportar realmente nada .
Por eso es tan gratificante encontrarse con piezas que se adaptan a un lenguaje diferente , manteniendo el fondo de la obra pero siendo capaces de contarla de forma diferente.
Generalmente , el programa del teatro Real es en estos aspectos excelente.
Ahora nos encontramos ante la Historia de un Soldado de Stravinsky , un pequeño cuento faústico donde conviven heroes , princesas y un malo malo ( nada menos que el diablo ) estructurado en base a dos pilares :
Una narración dialogada perfectamente comprensible ( ¡ que voces tan fantásticas! ).
Y una disciplina juvenil : el comic. Así a través de una pantalla y de ilustraciones contundentes , este espectáculo se convierte no sólo en un concierto sino también en una pieza visual.
¿ Que puede faltar ? no haber crecido, ser capaces de disfrutar igual que los pqueños que se asustan , se emocionan y no pierden un segundo.
Público
Cuando entramos en el campo de las adaptaciones , no es difícil encontrar proyectos que simplemente se limitan a podar , haciéndolos a veces incomprensibles o a rodearlos de códigos simples de color y movimiento sin aportar realmente nada .
Por eso es tan gratificante encontrarse con piezas que se adaptan a un lenguaje diferente , manteniendo el fondo de la obra pero siendo capaces de contarla de forma diferente.
Generalmente , el programa del teatro Real es en estos aspectos excelente.
Ahora nos encontramos ante la Historia de un Soldado de Stravinsky , un pequeño cuento faústico donde conviven heroes , princesas y un malo malo ( nada menos que el diablo ) estructurado en base a dos pilares :
Una narración dialogada perfectamente comprensible ( ¡ que voces tan fantásticas! ).
Y una disciplina juvenil : el comic. Así a través de una pantalla y de ilustraciones contundentes , este espectáculo se convierte no sólo en un concierto sino también en una pieza visual.
¿ Que puede faltar ? no haber crecido, ser capaces de disfrutar igual que los pqueños que se asustan , se emocionan y no pierden un segundo.
Público
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