NOVELA: EL DIA DE MAÑANA de Ignacio Martínez de Pisón



Seix Barral. Biblioteca Breve

376 páginas


Generalmente, cuando una novela opta por establecer narrativamente un punto de vista plural en el desarrollo de la historia de un personaje, el resultado ( denominado de forma cursi como caleidoscópico ) , tiende a ofrecer del mismo perfiles contradictorios que posiblemente lo enriquecen.

No es esta la dinámica de esta, digámoslo ya, excelente novela: Justo Gil puede producir sentimientos algo dispares entre sus "contadores" , pero siempre ( o casi, si exceptuamos al niño y al retrasado ) bastante negativos, siendo el más positivo la compasión. Su evolución en ningún caso presenta disculpas; si bien asistimos a su desarrollo desde su llegada a Barcelona como un mísero emigrante y esta es amplia, siempre aparece marcada por la mediocridad y la absoluta falta de escrúpulos.

Lo que establece Martínez de Pisón es una estructura totalmente al servicio de la narración, creando una visión plural que, por un lado, sirve para integrar la totalidad de la vida del "narrado" y, al mismo tiempo, dibujar un cuadro coral de la sociedad de la época desde diferentes perspectivas.

Como novela histórica, El Día de Mañana es un acierto absoluto dado que otorga a cada bloque su propia entidad, no siendo en ningún caso meras herramientas , y así nos traslada a la España entre los años sesenta y setenta con sus estructuras sociales, sus costumbres, sus órganos de poder, su entorno cotidiano...

Pero además, en su capacidad de introspección, nos regala el interior de unos personajes que se debaten como pueden en la marea de la Historia, incapaces a veces de algo más que sobrevivir a la degradación y otras en el desconcierto del cambio.

El Dia de Mañana funciona por lo tanto en lo general y en lo particular, en los colores de fondo y en el detalle, pero sobre todo funciona como un exponente perfecto de como se cuentan las historias que merecen ser contadas.


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