Inglaterra. 2010
Carey Mulligan. Andrew Garfield. Keira Knightley
Aunque ahora toca hablar de cine, quiero hacer una referencia literaria : Kazuo Ishiguro, un escritor que considero de los más dotados actualmente, con esquisito talento, capacidad de riesgo y una imaginación narrativa que no necesita escapar de lo cotidiano para visitar otros mundos.
Nunca me Abandones es una maravillosa novela, sorprendente, capaz de transportarnos e infinitamente triste. Su transfondo narrativo tiene una potencia desoladora y capaz de ponernos al límite, y de hacerlo con aparente sencillez.
Su traslación a imágenes, sólo precisaba seguir esa estela , no hacía falta aportar nada más, y eso es lo que funciona en esta película que consigue hacernos llegar toda su melancolía, su desesperada lucha por la vida, su frustración y , por supuesto, su infinita tristeza.
Creo que es muy difícil verla sin que a uno se le encoja el corazón.
Público
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